Imola y Mónaco fueron cruciales para entender nuestras debilidades
El piloto español Fernando Alonso (Aston Martin) afirmó que los Grandes Premios de Emilia-Romaña y Mónaco, donde terminó en undécimo lugar el domingo, fueron «claves» para comprender las «debilidades» de sus coches y considera que son «una gran señal de alerta» para prepararse y mejorar en futuras carreras.
«Estos dos fines de semana fueron cruciales para entender nuestras debilidades, comprender el coche y mejorar. En las dificultades siempre se obtienen más conclusiones que en las victorias, donde los problemas se pasan por alto con euforia. Estamos aprendiendo mucho. De cara al futuro, el resto del año, 2025 y 2026, estas dos carreras fueron una gran llamada de atención y serán muy beneficiosas para nosotros», dijo a DAZN.
En cuanto a la carrera, el asturiano explicó que se centraron en sumar puntos al canadiense Lance Stroll. «Hicimos todo lo que pudimos para sumar algunos puntos. Iba a ser difícil, así que intentamos parar con Lance para que pudiera tener neumáticos nuevos e intentar atacar a Gasly, pero tampoco pudimos. Fue un fin de semana en el que una vez más tuve mala suerte. El coche no estaba en posición de sumar puntos, no digo que hayamos perdido una oportunidad de oro, pero cuando estás yendo fuerte y quieres llegar muy lejos, y de repente aparece una bandera roja y debes parar. Llegar al final de la carrera es casi un suicidio, porque tienes que dar 71 vueltas», señaló.
«Eso es lo que intentamos hacer y al final aguantamos, pero a un ritmo muy, muy lento. Y luego también mala suerte, porque después del incidente el coche de Lance estaba en décima posición por un punto, pero reposicionaron todos los coches y nuevamente hubo gente que tuvo mucha suerte hoy, porque salieron con neumáticos medios en la salida y tuvieron suficiente suerte para esforzarse y llegar hasta el final», continuó.
Por otro lado, admitió que fue «una carrera extraordinariamente aburrida, como siempre se espera en Mónaco». «Solo hay una pequeña esperanza: que haya una parada en boxes y que alguien pueda perderse la parada o que haya un coche de seguridad. Cuando incluso quitas esa parada porque con una bandera roja ya no necesitas parar, las cosas cambian dramáticamente, por lo que la carrera cobra vida y te duele y en la salida de hoy no pasó nada detrás de nosotros y tuvimos una carrera muy aburrida», señaló.
Finalmente, Alonso lamentó la diferencia de rendimiento del coche en comparación con el mismo tramo de la temporada pasada. «El año pasado estábamos en una serie de circuitos que eran muy favorables para nuestros coches. En Mónaco terminamos en segundo lugar, luego fuimos a Canadá, todavía con un ritmo muy fuerte, en la primera línea de la parrilla… Este año llegamos con sensaciones muy diferentes y con algunas dudas después de Imola y Mónaco, donde no pudimos ir rápido. Hasta entonces tenemos que darlo todo y tenemos que mejorar en el campo para obtener resultados y vendrán días mejores y debemos estar unidos».
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