Factores del declive de la paloma europea.

Un estudio realizado por el IREC y el IESA (CSIC) explica cómo el cambio de uso del suelo en España y Francia, asociado a la composición y estructura de los suelos agrícolas o forestales, ha influido en el marcado descenso de las poblaciones de paloma europea.
Sabíamos que la intensificación agrícola, la incidencia de ciertas enfermedades parasitarias y la presión de la caza insostenible pueden desempeñar un papel destacado en el estado de la población mundial de paloma europea (tortuga estreptopelia).
También sabíamos que el tipo de hábitat y el uso del suelo son decisivos a la hora de explicar la idoneidad de una zona concreta para albergar poblaciones estables de esta ave migratoria, que necesita tanto árboles como zonas verdes abiertas para anidar y alimentarse. Lo que aún no sabíamos era cómo los cambios en la disponibilidad de tierras agrícolas y forestales podrían influir en la abundancia de esta especie.
Un nuevo estudio de Grupo de Investigación en Ecología y Manejo de Vida Silvestre del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC – CSIC, UCLM, JCCM) y del Instituto de Estudios Sociales Avanzados (IESA – CSIC), publicado en la revista Ardeola, evaluaron las tendencias recientes de la población de palomas europeas en Francia y España y su relación con los cambios en el uso de la tierra. Para ello, los investigadores analizaron el cambio en 15 variables de uso del suelo relevantes para las palomas europeas y comprobaron cómo se relacionaban los cambios entre sí.
Los resultados del estudio muestran una marcada disminución en las tendencias poblacionales de paloma europea entre 2001 y 2019 en ambos países, siendo más pronunciado en Francia. La comparación de los valores poblacionales del primer y último año del estudio indica que el descenso en España fue del 27% y en Francia del 49%.
También indican que los cambios en las tierras agrícolas se explicaron principalmente por cambios de tierras a otros usos agrícolas, mientras que los aumentos en las áreas de matorrales se asociaron principalmente con una disminución en las áreas boscosas, y los aumentos en las áreas urbanas ocurrieron a expensas de las tierras agrícolas.