El presidente Laliga, Javier Tebas, aseguró que España es «el país con comportamientos menos racistas e intolerantes» en Europa y dijo que estas actitudes «deben ser monitoreadas desde el momento en que un aficionado sale de su casa hasta que regrese», además de subraya el hecho de que Laliga logró «terminar».
«Les dije a mis compañeros de equipo varias veces: España: no solo en los estadios y en el entorno de fútbol, es el país con comportamientos menos racistas e intolerantes. Lo que sucede es que cuando sucede en España, hace ruido. Por ejemplo, en el clásico de los insultos en Lamine Yamal, había cuatro personas, no 80,000.
En un año en el que tuvo lugar la primera frase para el odio en Laliga, la de los cinco fanáticos en Valladolid para insultos racistas en Vinícius. «Era importante porque por primera vez era un crimen de odio. El delito de odio es más castigado en nuestro código penal que el delito de intolerancia contra la integridad moral. Fue un largo camino; cuando comenzamos a denunciar, muchos fiscales consideraron que no hay delitos en estos insultos que vemos en los estadios.
«Tuvimos que tener una reunión con la Secretaría Técnica del Fiscal para explicar que podría haber delitos de odio. Algunos casos que tuve con las personas que insultó fueron acordadas, como en Mallorca o Valencia, algunos eran menores, y fueron más que la integridad moral. Es necesario en nuestra lucha contra los crímenes, el racismo y la intolerancia», agregó.
Las cinco personas fueron sentenciadas a un año de prisión, una multa de 1.800 euros, descalificación del sufragio pasivo y por el trabajo de enseñanza y la prohibición de los estadios. «Es muy importante, no irán a prisión, pero tendrán antecedentes penales, no podrán ir a los estadios. No nos dedicamos a seguir lo que está sucediendo en el estadio; estos comportamientos deben ser monitoreados desde el momento en que un aficionado sale de su casa hasta que regrese», dijo.
En todos los casos, Laliga es una persona como una acusación particular. «Cuando llegué a la presidencia en 2013, estaba muy acostumbrado a escuchar escalas del estadio, como el grito homofóbico de» Maricón «cuando se eliminó el portero o el grito de» uh, uh «a la jugadora de color. Comencé una campaña bastante difícil. Racies o homofóbica, o gritos como» puta cataluña «o» puta, «, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos a las figuras, o», lo que miramos, lo que miramos, lo que miramos, lo que mira, lo que parece, lo que parece, lo que parece una gran cantidad «. Todavía era una manifestación de odio por un área de España o en el territorio nacional «, dijo.
«Nos las arreglamos para concluir los gritos escalados, que ya no existen en los estadios. Ahora, los gritos de la habitación están relacionados con las ofensas de intolerancia, odio, racismo o homofobia.
Para seguir estos delitos, el empleador se basa en herramientas como Laliga vs. «Ha habido una disminución suficiente en las conversaciones de comportamientos intolerantes y odio en las redes sociales», dijo. «Deberíamos diferenciar los tipos de controversia. Si nos limitamos al problema de la intolerancia, la homofobia y el saludo, creo que hay mucho menos», dijo.
También aseguró que hay «menos» grupos Ultras. «En un momento fue un regreso, pero lo tenemos bastante controlado», dijo. «Todos saben que en España es el fútbol más seguro. En los partidos de» campeones «, cuando llega un pasatiempo de conflicto, hay miseria; en nuestros partidos de liga, no. Por algo es», dijo.
«Cuando los primeros equipos de RFEF llegan a la segunda división, hay fanáticos que vienen un poco aslew. Continuó.
Finalmente, Tebas destacó los números históricos la temporada pasada en términos de seguimiento. «Hay varios valores que determinan que fue el máximo campeón de la ayuda de los espectadores EA Sports y en Laliga Hypermotion, grabé un registro de audiencia televisiva.
