El lunes, la ejecutiva de ERC consideró una «ofensa» que el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, responsabilizara al partido de su posible detención a su regreso a Cataluña y le exigió rectificar y pedir disculpas.
En un comunicado, admiten que los opositores políticos pueden criticar la decisión de los republicanos de apoyar la investidura del primer secretario del PSC, Salvador Illa, como presidente de la Generalitat, pero «no se pueden sobrepasar ciertos límites».
«Considerar que una hipotética detención del presidente Puigdemont es culpa de ERC es un delito», argumentaron después de que el expresidente catalán asegurara el sábado que el apoyo republicano al PSC hacía de su detención una posibilidad real en unos días.
En este sentido, la dirección de ERC pide al expresidente catalán que rectifique y pida disculpas, alegando que son una formación soberana, democrática y que siempre tomarán decisiones políticas en función de su militancia, «con mayoría y consenso».
«Es evidente que el partido y el entorno político de Puigdemont consideran perjudicial para sus intereses electorales la decisión adoptada por la base de Esquerra el pasado viernes», afirman.
«vergonzoso y ofensivo»
Los republicanos advierten que utilizar «la represión para intentar obtener una ventaja electoral es vergonzoso y ofensivo», un problema por el que también piden rectificación.
La ejecutiva de ERC pide también a las organizaciones y entidades cívicas que se han opuesto a la decisión del partido que respeten «la militancia y el impecable proceso democrático».