El TSJC ratifica condena a Tanlongo por indemnización al Racing
El futbolista argentino Mateo Tanlongo deberá indemnizar al Racing de Santander con un millón de euros por no formalizar el contrato laboral con este club tras recibir una oferta de un equipo danés. Así lo estableció el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) en una sentencia que desestima el recurso del jugador contra la decisión del Juzgado de lo Social número 3 de Santander, que admitió en abril la solicitud del club deportivo para recibir una indemnización por la extinción del contrato de trabajo.
La resolución de la Sala de lo Social del TSJC, notificada este martes, no es firme, pudiendo presentarse recurso de apelación ante el Tribunal Supremo. El tema de este juicio son los hechos ocurridos a finales de agosto del año pasado. Luego de conversaciones entre el jugador y sus representantes con socios del club, Tanlongo, su padre, su representante y un amigo viajaron a Santander, donde el futbolista realizó un video promocional sobre el terreno de juego de Racing luciendo la camiseta del equipo y el dorsal elegido.
Ese mismo día acordaron reunirse más tarde para firmar los contratos que las partes habían intercambiado unos días antes. Pero el jugador y sus representantes no se presentaron al fichaje y alegaron haber recibido una oferta de otro equipo. La ventana de fichajes se cerró dos días después, por lo que el Racing de Santander tuvo que buscar otro jugador en apenas veinticuatro horas. El juez de primera instancia y ahora los vocales de la Sala de lo Social del TSJ Cantabria coinciden en que el hecho de que no se firmaran los contratos no significa que no existiera relación laboral.
La sentencia explica que el principio general es que existe libertad de forma en los contratos y que, tratándose de una relación laboral especial de deportistas profesionales, «la norma no establece la necesidad de la forma escrita como requisito constitutivo del presente contrato.»En segundo lugar, los jueces concluyen que Tanlongo dio su consentimiento al contrato, lo que se deriva de pruebas como: los mensajes que el jugador intercambió con el director técnico y el técnico de Racing, la elección del dorsal con el que jugará, correos electrónicos entre el club, los representantes del futbolista y el equipo que deja.
También son indicativos la grabación de un vídeo de la presentación del jugador, el viaje que realizó a Santander con otras tres personas (procedentes de Londres y Buenos Aires) y el hecho de que Racing cubrió todos los gastos. Estos indicios, junto con el testimonio que se practicó en el juicio, llevaron al juez de primera instancia y ahora al Tribunal a ver «una conexión lógica y razonable entre tales hechos y la realidad del consentimiento del jugador a su acuerdo.»
La rescisión unilateral del contrato da lugar a una indemnización para el Racing, ya que «se ha causado un perjuicio manifiesto» al club. A los gastos abonados por el desplazamiento y alojamiento del jugador y sus acompañantes, la Sala añade que «el club se vio obligado a fichar» a otro jugador la víspera de la finalización del mercado de fichajes y que, además, sufrió «un claro perjuicio a su imagen», dado que el vídeo promocional contó con la asistencia de terceros. Finalmente, el importe de la indemnización asciende a un millón de euros, tal y como se especifica en la cláusula séptima para el caso de resolución unilateral del contrato por parte del jugador. Y el tribunal entiende que si ha habido «un incumplimiento total del contrato laboral de un deportista profesional con cláusula de rescisión, la estipulación contenida en el mismo no puede ser objeto de moderación.»
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