El dólar paralelo de Venezuela sube antes de la campaña presidencial
El precio del dólar en el mercado paralelo de Venezuela ha superado su máximo histórico esta semana, alcanzando más de 40 bolívares por unidad. A pesar de la intervención sin precedentes del Banco Central este año para mantener estable el tipo oficial justo antes de la campaña electoral.
Medios venezolanos como Banca y Negocios informaron que el Banco Central de Venezuela intervino en el mercado cambiario con 100 millones de dólares en la última semana, la mayor participación en el primer semestre de 2024.
Expertos consultados por Voz de America señalan que estas operaciones se conocen en el mundo financiero como intervenciones cambiarias «sucias», que ocurren cuando las autoridades monetarias de un país influyen directamente en la fluctuación del tipo de cambio.
En Venezuela, este tipo de operaciones oficiales son habituales desde 2019. La cantidad de dólares inyectados o «quemados» en el mercado hasta el lunes fue un 47% superior a la semana anterior, según medios venezolanos.
El tipo de cambio oficial se mantiene fluctuando entre 35 y poco más de 36 bolívares desde octubre pasado, siendo el precio del dólar paralelo ligeramente superior. A principios del año pasado, ambas tasas eran prácticamente similares.
Desde enero de 2024, sin embargo, la diferencia entre ambos tipos se fue ampliando paulatinamente, hasta que el dólar «negro» supera los 40 bolívares, como ocurrió en mayo.
Aunque el tipo de cambio no oficial bajó durante unos días, volvió a subir a ese nivel esta semana. La brecha alcanzó el 12% en mayo. El martes fue 9,7%, ya que el dólar paralelo se valoró en 40,27 Bs.
Como buena parte de la economía nacional, la cocotera La Bendiciones de Dios ofrece sus productos en dólares.
Andry Araque, dueño del negocio, ubicado en la acera de uno de los principales bulevares de Maracaibo, en el occidente del país, suele detallar sus ofertas a sus clientes en dos monedas: moneda estadounidense y bolívares venezolanos.
«Tus clientes dejan de comprarte si calculas tu dólar en el techo del mercado paralelo, que ronda los 40 bolívares. No puedo ni ponerlo en 36 bolívares (el tipo de cambio oficial), porque estoy perdiendo 5 bolívares» por cada dólar, explicó a VOA. Suele vender 250 cocos a la semana.
Cuando necesita comprar insumos para su negocio, Araque prefiere pagar en bolívares antes de que se deprecien. «Me quedo con los dólares», dijo.
Una amplia brecha
Luis Crespo, economista y profesor de la Universidad Central de Venezuela, explicó a VOA que la amplitud de la diferencia entre las tasas oficiales y no oficiales en el primer semestre de este año se debe a una «limitación» de la economía nacional para satisfacer la demanda de dólares, razón por la cual los actores recurren al mercado paralelo.
El «despilfarro» del gobierno venezolano en la campaña electoral para buscar la reelección del presidente Nicolás Maduro también representa una «ampliación del gasto fiscal», advirtió.
El impacto de estos gastos es precisamente esa brecha entre el dólar oficial y el dólar paralelo, entre el 10% y el 12%, dijo. «Fue uno de los más grandes de los últimos dos semestres».
Tanto el gobierno como la oposición han iniciado giras políticas y actos de proselitismo en Caracas y el interior del país para conquistar votantes, aunque la campaña electoral oficial comienza el 4 de julio, dentro de 3 semanas.
Tasa «sobrevalorada».
Gustavo Machado, economista y profesor de la Universidad del Zulia, comentó a Voz de America que el aumento de la liquidez monetaria en Venezuela -la cantidad de dinero en manos de la gente- era mayor que el aumento de las reservas internacionales.
Explicó que el nivel de reservas internacionales, de 10.224 millones de dólares este martes, es «limitado» y no genera la confianza suficiente para percibir que la estabilidad del tipo de cambio se pueda mantener por «un período prolongado».
Un escenario ideal sería tener un programa de «estabilización integral» donde se puedan obtener divisas de las exportaciones y del financiamiento de entidades multilaterales, dijo.
El gobierno no tiene acceso a estos préstamos de organismos como el Fondo Monetario Internacional debido a la crisis política que ha llevado a decenas de gobiernos a cuestionar la legitimidad de Nicolás Maduro como presidente desde 2019.
La quema de millones
Crespo, por su parte, aseguró que el precio oficial del dólar «está sobrevaluado» debido a las intervenciones del BCV, que son mayores o menores cada mes según las «expectativas devaluatorias» que marque el Estado venezolano.
En 2023, mantener esta política de intervención le costó al Estado 4.600 millones de dólares, y en lo que va de 2024, significó «quemar» 1.600 millones de dólares, afirmó. Eso supone un total de 6.200 millones de dólares en intervenciones monetarias «sucias».
El tipo de cambio oficial, aunque estable, tiene el efecto negativo de estimular las importaciones y encarecer los productos venezolanos en la economía internacional, afirmó Crespo.
«Veremos esta brecha expresada en las cifras de inflación. Cuando esa brecha se abra y tengan que acceder a monedas más caras y si está ligado a su proceso de producción, los empresarios lo transferirán a sus estructuras de precios y costos”, dijo.
Señaló que la inestabilidad del tipo de cambio impacta en la familia venezolana, cuyo poder adquisitivo está cada vez más «debilitado».
La falta de ventas es otro síntoma de esta inestabilidad y de la economía en general, según expertos como Crespo.
Jean Pool Marenco, fontanero de 29 años que ofrece sus servicios en el Boulevard Cecilio Acosta de Maracaibo, lleva 4 días sin conseguir un solo trabajo.
«Hay que trabajar todos los días para poder comprar algo en la tienda», dijo, preocupado porque un gran charco impidió que los clientes pasaran por el cartel de su negocio el miércoles.
El Banco Central informó la semana pasada que los precios en mayo subieron en promedio un 1,5%, menos que en abril (2%). Pero el organismo de control financiero independiente de Venezuela dijo que la inflación el mes pasado fue del 3,9%, frente al 2,9% de abril.
El presidente Maduro aseguró este fin de semana que los indicadores macroeconómicos de Venezuela son «impresionantes» y ofrecen «buenas perspectivas» de recuperación. Sus artículos de campaña de reelección destacan entre sus «logros» la superación de la crisis.
En la última década, el país ha experimentado una aguda crisis económica, que se refleja en un ciclo de hiperinflación, escasez de productos esenciales, bajo poder adquisitivo y devaluación de la moneda -se han producido dos conversiones monetarias-, según expertos y empresas privadas.
Maduro atribuye esta crisis a una supuesta «guerra económica» por parte de actores nacionales e internacionales y al «bloqueo» de las sanciones de Estados Unidos contra su gobierno.
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