El BNG se opone a la «privatización» de centros de crisis 24 horas para víctimas de violencia de género

El BNG se opone a la «privatización» de centros de crisis 24 horas para víctimas de violencia de género

La vicepresidenta primera del BNG en el Parlamento, Olalla Rodil, denunció que la Xunta sacó a subasta por 7,5 millones de euros el contrato para la gestión de los cinco centros de crisis abiertos las 24 horas que prestan atención a víctimas de violencia sexual, que la región autónoma espera que entren en funcionamiento en el último trimestre del año. «El deseo de privatización es tal que ya iniciaron este proceso hace un año y tuvieron que pararlo porque estos centros ni siquiera se han construido», criticó este lunes en rueda de prensa en la Cámara de Galicia.

Según denunció la diputada nacionalista, se trata de los cinco centros previstos en Lugo, Ourense, Santiago, Ferrol y Vigo, «que se financian con fondos del Pacto de Estado contra la violencia de género y que están pensados como servicios de atención integral a las víctimas de violencia sexual». En este sentido, Rodil se pregunta «dónde está el límite para el PP», argumentando que los populistas «han privatizado centros menores; el 80% de las plazas en residencias de ancianos y abren ahora la puerta al crecimiento del negocio de las empresas privadas en la atención a víctimas de violación. «¿Hay algo que no se pueda hacer en los negocios? ¿Hay algo que no se debería utilizar para enriquecer a un puñado de empresas?»

Según explicó Rodil, la licitación supone que los centros contarán con siete empleados. En concreto, dos trabajadores sociales, tres psicólogos, un abogado y una persona a tiempo parcial en el ámbito de la administración. En este sentido, ha criticado que estas «privatizaciones» además de «generar un buen nicho de negocio para las empresas, generan precariedad a los trabajadores y usuarios». «Precariedad laboral con personal claramente insuficiente, pero también mala atención a los usuarios porque el propio pliego de licitación del PP dice que parte de esa atención se dará por vía electrónica o por teléfono. No sabemos si a través de la pantalla o por teléfono», lamentó.

Con estos argumentos, el BNG exige que se paralice este proceso y se ponga «un límite moral al negocio» para intentar garantizar la gestión pública de estos centros de crisis a través del personal propio del Departamento. También insistió en que la atención a las mujeres «no se puede dejar en manos de empresas multiservicios» y ejemplificó que Eulen «ya está enviando ofertas de trabajo». «Es curioso», afirmó, «porque el proceso de licitación aún está abierto y Eulen ya está ofreciendo contratos de trabajo».

FUENTE

nuevaprensa.info

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *