Efecto secundario de medicamentos para la obesidad: más desperdicio de alimentos

Regularmente se realizan estudios que investigan nuevas cualidades potenciales de los superfármacos contra la obesidad y la diabetes. Pero también podría tener un «efecto secundario» inesperado e involuntario: según una nueva investigación, en realidad podría aumentar el desperdicio de alimentos, especialmente en los primeros meses de terapia, cuando los pacientes aún no están acostumbrados a la nueva rutina de alimentación inducida por el tratamiento.
Un nuevo estudio ha documentado precisamente eso: el hecho de que tomar medicamentos contra la obesidad provocó que algunos adultos estadounidenses tiraran más comida que antes de comenzar el tratamiento. Este aspecto sin precedentes lo explora un estudio de la Universidad Estatal de Ohio publicado en Nutrients, en el que los autores encuestaron a 505 personas que tomaban medicamentos agonistas de Glp-1 como Ozempic*: el 25% de los encuestados dijeron que desperdiciaban más comida desde que tomaron la terapia.
Las personas que experimentaron náuseas tenían más probabilidades de informar un aumento en el desperdicio de alimentos. Tomar medicamentos durante un período de tiempo más prolongado y comer más verduras se asoció con un menor desperdicio de alimentos. Los científicos de la universidad estadounidense ven este estudio sobre el comportamiento del consumidor como un primer intento de evaluar los efectos de estos medicamentos cada vez más populares en la producción y el desperdicio de alimentos a nivel nacional y mundial.
Este fue un estudio piloto para comenzar a examinar las implicaciones de los medicamentos y también para tratar de comprender qué categorías amplias de alimentos son más o menos favoritas después de iniciar el tratamiento farmacológico. El hecho de que el desperdicio de alimentos parezca «disminuir a medida que los pacientes se ‘aclimatan'» al medicamento sugiere que puede haber una solución simple: informarles en la primera toma que pueden encontrarse desperdiciando alimentos a medida que cambia su dieta. Esto nos permitiría reducir el desperdicio de alimentos y también reducir los costos.
Se estima que un tercio de los alimentos se desperdicia en los EE. UU., y aproximadamente la mitad de ese desperdicio es atribuible a los consumidores, que tiran un promedio de 450 gramos de alimentos por persona por día, dicen los autores del estudio. En la primavera de 2024, alrededor del 6 por ciento de los adultos estadounidenses informaron haber tomado agonistas del GLP-1, que tratan la diabetes tipo 2 y la obesidad al actuar sobre una hormona en el intestino para reducir el azúcar en la sangre, retardar el vaciado del estómago y enviarle al cerebro una sensación de saciedad.
FUENTE