Dos hermanos aceptan un año y medio de cárcel por defraudar a una pareja con un alquiler falso en Gijón
Dos acusados de estafar a un matrimonio con un alquiler falso en Gijón admitieron el miércoles los hechos que les imputa la Fiscalía de Gijón y aceptaron una condena de un año y seis meses de prisión cada uno, además del pago de una multa y una indemnización a las víctimas, que tenían dinero por adelantado como garantía.
Los acusados, que son hermanos, llegaron a un acuerdo en la sesión judicial prevista para este día en la Sección VIII de la Audiencia Provincial de Asturias con sede en Gijón, según informa una nota de prensa de la Fiscalía.
Los acusados (1975 y 1969), de mutuo acuerdo, se pusieron en contacto con la víctima, quien junto con su marido había publicado un anuncio en una página web mostrando su interés en alquilar una casa en Gijón para utilizarla como residencia habitual, ciudad en la que ya estaban domiciliados, proporcionando su número de teléfono como forma de contactar a las personas interesadas.
Alrededor de las 16:00 horas del 14 de noviembre de 2022, la pareja recibió un mensaje vía WhatsApp, enviado desde el teléfono del acusado 1, en el que les informaba falsamente que tenía un apartamento en alquiler en la calle, con un alquiler mensual de 450 euros.
Tras continuar las negociaciones mediante recurso convencional, llegaron a un acuerdo, añadiendo el acusado que si querían acelerar el procedimiento, antes de visitar la casa podrían pagar la suma de 450 euros, que se convertiría en una fianza en el momento de la ejecución del contrato.
También les explicó que la vivienda era de su propiedad y de su esposa y, en señal de confianza, les envió vía WhatsApp la foto frontal de un DNI a nombre de una mujer, indicando que se trataba de su documento nacional de identidad, cuando su propietario no tenía nada que ver con estos hechos y denunció su secuestro en Alicante en febrero de 2020.
Los interesados accedieron a la petición, concertando una cita con el presunto propietario a las 14.45 horas en el portal del edificio, abonando por adelantado la cantidad de 450 euros a través de un depósito en cajero automático.
Cuando acudieron a la cita a esa hora y después de esperar un rato sin que apareciera nadie, decidieron llamar al supuesto dueño.
Tras numerosas llamadas, el teléfono figuraba como no disponible, al que enviaron varios mensajes de WhatsApp comprobando que el segundo tick de confirmación no estaba activado.
Entonces decidieron llamar a los apartamentos del segundo piso del edificio, donde los vecinos les dijeron que el apartamento no estaba en alquiler. La cuenta a la que se enviaron los 450 euros fue contratada online por uno de los acusados, que es su único propietario.
Tras recibir el depósito, el mismo día se realizaron dos pagos, uno al teléfono móvil del otro acusado y otro pago de 150 euros a un cajero automático de Barcelona.
Los hechos fueron considerados constitutivos de un delito de engaño en virtud del art. 248.1 y 250.1.1 del Código Penal. Tras admitir los hechos, cada uno de los acusados aceptó una pena de 1 año y 6 meses de prisión, además de pagar una multa de seis meses con una tarifa diaria de ocho euros y costas judiciales.
En materia de responsabilidad civil, el acusado indemnizará solidariamente a las víctimas con 450 euros, más los intereses legales correspondientes.
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