Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría Provincial de Cáceres detuvieron el 10 de octubre en la ciudad cacereña de Vegaviana a un hombre cuyo paradero se desconocía, aunque tenía una orden europea de deportación desde 2018 tras cumplir condena por su implicación en un delito cometido en Adra (Almería) en 1998.
La localización del condenado tuvo lugar en una explotación agrícola en el municipio de Vegaviana (Cáceres), donde trabajaba como jornalero. Tras confirmar su identidad, se verificó en las bases de datos que tenía una orden de expulsión del territorio nacional vigente por su participación en un delito en 1998.
El crimen se había cometido en una finca en la ciudad de Adra (Almería), por el que fue condenado a 28 años de prisión. Tras ser puesto en libertad, se emitió una orden de expulsión. Desde entonces, vivió en la clandestinidad para evitar ser expulsado, llevando una vida discreta para evitar ser descubierto, según informó la Policía Nacional en un comunicado de prensa.
Una vez detenido y con las autorizaciones judiciales correspondientes, fue trasladado por agentes de la Brigada de Inmigración de la Policía Nacional en Cáceres al centro de internamiento de extranjeros en Madrid. Permaneció allí hasta su expulsión definitiva el 17 de octubre. Se le prohibió regresar a Europa durante 10 años.
Además, en el mismo operativo, otra persona fue detenida por violar la Ley de Extranjería.
