Desarticulada red de tráfico de drogas en Málaga y Elche con 1.200 kilos de hachís

La Policía Nacional, en colaboración con la NCA británica, desmanteló en Marbella (Málaga) y Elche (Alicante) una organización presuntamente dedicada al transporte de droga en camiones. Durante la operación, se incautaron 1.200 kilogramos de hachís y se arrestaron a siete británicos, supuestos miembros de la red que transportaba la droga en grandes bidones de plástico llenos de arena fina de mortero de construcción.
Los agentes llevaron a cabo registros en una propiedad en Elche, utilizada por la organización como «guardería» para la sustancia estupefaciente, y en tres viviendas en Marbella y Fuengirola, donde se encontraron muestras de hachís con los mismos anagramas que la droga hallada en el barco. La investigación comenzó en abril del año pasado tras descubrir que un grupo de ciudadanos británicos estaba involucrado en el tráfico internacional de drogas utilizando camiones de gran tamaño.
Tras localizar uno de los vehículos utilizados por el grupo para transportar droga, que estaba registrado a nombre de la empresa de los detenidos, los agentes descubrieron una propiedad en Elche utilizada como «guardería» para esconder la sustancia estupefaciente. En el lugar, se observó un traslado constante de material de construcción apilado en tarimas, como adoquines, tambores y sacos de arena.
Los investigadores detectaron una intensa actividad de la organización en el barco y decidieron intervenir, encontrando 1.200 kilogramos de hachís y deteniendo a cuatro miembros. La droga estaba distribuida en paquetes y oculta en grandes bidones de plástico llenos de arena de construcción para ser transportada en camiones. Además de la droga, se encontraron inhibidores de frecuencia durante el registro.
Paralelamente a la operación en el barco, se llevaron a cabo detenciones en Marbella y Fuengirola, donde se incautaron diversas cantidades de hachís en pastillas, algunas con los mismos anagramas que las encontradas en Elche. Se confiscaron más de 63.000 euros en efectivo, cinco coches, un camión pesado y varios dispositivos electrónicos, como un detector de frecuencia y teléfonos móviles.
La operación fue posible gracias a la financiación de la Unión Europea, que busca establecer un entorno de seguridad futuro, abordar amenazas emergentes y proteger a los ciudadanos del terrorismo y el crimen organizado. La DG HOME de la Comisión Europea y fondos como los Fondos de Seguridad Interior (FSI) apoyan a los Estados miembros en la lucha contra las amenazas criminales.
Las acciones realizadas en el marco de este plan fueron cofinanciadas por la Unión Europea, con el objetivo de combatir las redes criminales que representan las mayores amenazas para la seguridad de los ciudadanos de la UE y de la Unión en su conjunto.
FUENTE