Collboni genera descontento con veto a apartamentos turísticos.
La propuesta de eliminar los más de 10.000 apartamentos turísticos de la ciudad de Barcelona ha generado multitud de opiniones. Mientras todos los grupos políticos del Ayuntamiento cargan contra la medida por un motivo u otro, desde la patronal son muy criticos con una norma que «acabará con el turismo familiar» y provocará la proliferación de apartamentos turísticos ilegales, afirman. Pero también entidades sociales partidarias del derecho a la vivienda, como el Sindicat de Llogateres de Catalunya, creen que frenar la concesión de licencias turísticas «podría quedar en nada» y reclaman más medidas.
La Asociación de Apartamentos Turísticos de Barcelona (Apartur) rechazó de plano la propuesta del alcalde socialista, Jaume Collboni. Consideran que «condena a muerte al sector del turismo familiar«, ya que asegura que es el principal cliente de alojamiento turístico, que representa el 40% del total de alojamiento turístico de la ciudad.
Por otro lado, advierten de que frenar las licencias de apartamentos turísticos no los hará desaparecer, sino que creará un «efecto llamada» sobre la proliferación de apartamentos turísticos ilegales. Según el empresario, la experiencia de otras normativas implementadas en la ciudad «lo demuestra». Y señalan que este tipo de negocios economía que se hunde «No paga impuestos y molesta a vecinos y turistas en lugar de promover la convivencia».
Además, la asociación destaca que las viviendas de uso únicamente turístico Representan el 0,77% del parque total de viviendas de Barcelona, por lo que la medida es «una cortina de humo para ocultar el fracaso de las políticas públicas de vivienda en la ciudad».
Por su parte, el Sindicat de Llogateres de Catalunya tampoco apoyó la propuesta de Collboni. Aunque una de sus principales reivindicaciones para facilitar el acceso a la vivienda es limitar el turismo, creen que la medida «no tendrá ningún efecto práctico» hasta dentro de cuatro años y medioo, cuando en 2029, según el alcalde, la propuesta entraría en vigor.
En este sentido, señalan que «el contexto político es incierto», por lo que el anuncio podría caer en cualquier momento antes de su implementación, tanto por un cambio de alcalde de la ciudad así como la modificación del decreto de la Generalitat que regula los apartamentos turísticos, lo que permitirá la aplicación de la propuesta de Collboni.
Además, la Unión también pone el foco en los apartamentos turísticos ilegales y pide al Ayuntamiento mecanismos más «eficientes» para rastrearlos. Y sobre todo centrarse en alquileres temporalesel principal mercado donde los pisos se desvían hacia «usos rentables», señalan, «para sortear el límite de la regulación de los alquileres».
