El secretario general de CC.OO., Unai Sordo, está dispuesto a negociar la entrada en vigor de la reducción de jornada si se convierte en un proyecto de ley este verano: «Podemos tener margen para negociar los plazos, no es necesario que entre en vigor en agosto».
Esto lo afirmó el lunes, junto al secretario general del sindicato en Cataluña, Javier Pacheco, y la secretaria general de Industria, Garbiñe Espejo, en una rueda de prensa previa a una concentración frente a la patronal catalana Foment para exigir que la jornada laboral se reduzca a 37,5 horas.
«No es necesario posponer la decisión de reducir la jornada laboral hasta el próximo año. No vamos a seguir así. Otra cosa es aprobar una ley, un proyecto de ley, que reduzca la jornada laboral a 37,5 horas, obviamente podemos negociar los términos», afirmó.
Según Sordo, la compensación por la reducción de jornada con horas extraordinarias está «absolutamente excluida» y el resto de cuestiones se pueden abordar en la mesa de negociación.
NO EXCLUYEN LAS PROTESTAS EN OTOÑO
Pidió a la CEOE que apoye la reducción de la jornada o el sindicato convocará protestas: «Si no hay apoyo, en otoño habrá movilización sindical sin duda».
También aseguró que la reducción de la jornada laboral no afectará a la competitividad de las empresas e instó al Gobierno a ser valiente y no «titubear».
«Instamos a las fuerzas políticas que apoyaron la investidura de Pedro Sánchez a que no flaqueen en este tema», y aseguró que el sindicato se encargará de promover un debate sobre la reducción de la jornada laboral en toda España.
CATALUÑA
Pacheco explicó que reducir la jornada laboral a 38,5 horas afectaría a 1,3 millones de trabajadores catalanes en convenios sectoriales, y reducirla a 37,5 horas afectaría a 2 millones.
Según él, la medida afectaría principalmente a los sectores del comercio, la hostelería y la industria agroalimentaria, donde 470.000 empleados catalanes ya trabajan menos de 37,5 horas semanales.
ACUERDOS COLECTIVOS
Espejo afirmó que los convenios colectivos en las industrias cárnica, textil y química están en un «estancamiento deliberado» por parte de los empresarios debido al proceso de negociación sobre la reducción de jornada.
Agregó que era «urgente» llegar a un acuerdo sobre una nueva ley de industria, ya que la última tenía 32 años.