Se recomienda a los jóvenes solicitar el Certificado Energético de Vivienda y a los propietarios solicitar la justificación del depósito.
El Colegio Oficial de Administradores de Fincas de Galicia (COAFGA) ha alertado nuevamente de que muchos inmuebles que se alquilan a estudiantes universitarios no cumplen las condiciones mínimas de vivienda.
En un comunicado, el colegio recuerda que las viviendas deben ser aptas para su uso. Si bien la ejecución de las obras puede ser negociada con el arrendatario, según lo permite la ley, las mismas deberán tener condiciones mínimas de habitabilidad y contar con instalaciones seguras y actualizadas de gas, electricidad y agua.
Asimismo, señalan que aquellos apartamentos que presenten daños graves o humedad insalubre pueden considerarse no aptos para habitar, situación en la que se encuentran algunas propiedades que se encuentran en el mercado de alquiler.
También explican que las fianzas requeridas (un mes es suficiente) son precisamente para reparar cualquier desperfecto que pueda ocurrir durante el periodo de alquiler del inmueble, y señalan que se podrán exigir otras garantías de pago para garantizar las reparaciones o el cobro de ingresos, como la garantía paterna.
Los administradores de propiedades también enfatizan que el grupo de estudiantes disfruta de los mismos derechos que cualquier inquilino y que los apartamentos que se les alquilan deben ser adecuados, especialmente si el precio es elevado, como suele ocurrir.
El colegio también recuerda que no se pueden realizar fiestas nocturnas que puedan molestar al resto de vecinos del edificio. Este mismo problema y el mal mantenimiento de las propiedades son, según los propietarios, las mayores desventajas de alquilar a este grupo.
Finalmente, Coafga recomienda a los jóvenes firmar el contrato y solicitar el Certificado Energético de Vivienda y, tras la firma, acreditar que han realizado el depósito en el Instituto Solista y de la Vivienda de Galicia (IGVS).
Entre otros consejos, los gestores recomiendan no aceptar pagar por ver una vivienda o alquilar sin visitar primero la propiedad.