El índice de precios al consumidor (IPC) disminuye al 1,5%, su nivel más bajo desde el año 2021.
La pendiente de septiembre fue menos acusada este año, y el Índice de Precios de Consumo (IPC), la referencia de inflación intermensual que publica el Instituto Nacional de Estadística, lo confirma: el crecimiento de los precios se desaceleró hasta el 1,5%, ocho décimas menos que en agosto, debido a los menores precios de la electricidad, los alimentos y el combustible.
Los últimos datos publicados el viernes llevaron el tipo de interés de referencia a su nivel más bajo desde marzo de 2021, en medio de la pandemia y cuando los precios de la energía comenzaban a dispararse, antes de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022.
El tipo básico, que excluye los precios más volátiles de los alimentos frescos y de la energía, también cayó tres décimas hasta el 2,4%.
Este mes de septiembre supone la mayor caída de la tasa de inflación en el último año y sitúa el dato de incremento de precios en la economía española por debajo del umbral de referencia fijado por el Banco Central Europeo, que se sitúa en el 2%.
En un balance enviado a la prensa, el Ministerio de Economía que dirige Carlos Cuerpo se felicita por una semana de buenos datos económicos, desde que se conoció la revisión de las proyecciones por parte de la OCDE. La continua reducción de la inflación, cree el Ejecutivo, demuestra la eficacia de su política económica, que permite a los hogares seguir ganando poder adquisitivo.
