La Policía Nacional detuvo en Melilla a cuatro personas por uso indebido de permisos de residencia mediante matrimonios de conveniencia, entre ellas una mujer que regenta una consultoría.
Además, otras dos personas son «buscadas y capturadas»: el presunto marido y uno de los testigos que intervino en una boda falsa.
Según un portavoz de la Jefatura de Policía de Melilla, a mediados de noviembre la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y la Falsificación de Documentos (UCRIF) fue informada por la Unidad de Documentación de Extranjeros (UDE), ambas pertenecientes a la Brigada Provincial de Inmigración y Fronteras, de la existencia de un posible matrimonio de conveniencia.
Una vez dados los primeros pasos, la futura novia explicó que sufrió amenazas, coacciones y ataques por parte de un exnovio para obligarla a casarse con un ciudadano marroquí de 51 años, contando todos los detalles del falso matrimonio celebrado ante notario en Melilla en mayo de este año.
La citada fuente detalló que cuando esta Unidad constató la existencia de delitos relacionados con la violencia de género, los hechos fueron puestos en conocimiento del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Cuatro de Melilla, competente para el conocimiento de este tipo de delitos penales, así como la Unidad Especializada: UFAM, cuyos agentes, tras las diligencias, procedieron a detener al exnovio de la víctima como presunto autor de un delito de violencia doméstica, además. por parte de la UCrif con labores de investigación encaminadas a esclarecer los hechos y los responsables.
Un portavoz policial explicó que el «modus operandi» consiste en contactar con un extranjero dispuesto a pagar una determinada cantidad de dinero para obtener un permiso de residencia en España.
Se propone obtenerlo mediante un matrimonio ficticio. A continuación, buscamos una mujer de nacionalidad española dispuesta a acceder a las pretensiones de formalizar un matrimonio de conveniencia.
Una vez que tienen a las dos personas principales, se captura a dos testigos. Todos los documentos necesarios se obtienen y llevan a la Notaria donde se formaliza la unión matrimonial con el correspondiente Acta Notarial, enlace que se inscribe en el Registro Civil.
Finalmente, el marido ficticio presentó una solicitud ante la Oficina de Extranjería para obtener un permiso de residencia en base a su nuevo estado civil con un ciudadano español.
Tras las investigaciones, la Policía Nacional pudo establecer que efectivamente el matrimonio investigado fue de conveniencia, así como la participación en los hechos de seis personas, quienes están siendo investigadas por la presunta comisión de los delitos de falsificación de documentos y facilitar la inmigración ilegal, además de los delitos de coacción y amenazas en el caso del exnovio de la falsa esposa.
A raíz de estos hechos, los agentes detuvieron a cuatro personas, entre ellas «una mujer que regenta una asesoría para extranjeros y que ya había sido detenida en varias ocasiones por hechos de naturaleza similar».
Asimismo, otras dos personas, el presunto marido y uno de los testigos que participó en el falso matrimonio, se encuentran a la espera de localización y detención.