El grupo parlamentario de Vox presentará una enmienda a todo el Proyecto de Ley de Presupuestos Comunitarios para 2025 si finalmente el Gobierno de Castilla y León aprueba el actual borrador en el Consejo de Gobierno para su posterior inscripción en las Cortes, pasos necesarios para la tramitación parlamentaria de las cuentas.
El abogado de Unidas-Podemos, Pablo Fernández, también confirmó que pedirá la devolución de las cuentas autonómicas hasta 2025 si finalmente quedan reflejadas en un proyecto de ley, en la línea de lo que hizo con los presupuestos anteriores que el político de la formación morada siempre ha rechazado enteramente «por la coherencia política» frente a las cuentas que considera «en la antítesis» de su ideología y por la «coherencia», además, con la reciente votación en contra de los sectores no financieros. techo de gasto.
Pablo Fernández y el Grupo Vox pedirían así la devolución de las cuentas autonómicas de 2025, aunque por motivos diferentes, a diferencia de la decisión del resto de grupos de la oposición, que en esta ocasión se mostraron partidarios de no cambiar nada. . Las cuentas a discutir y negociar puntos a través de enmiendas parciales en distintas comisiones, algo que el propio presidente de la CA, Alfonso Fernández Mañueco, agradeció ayer «cara a cara» con el leonés Luis Mariano Santos.
Sucede que el Grupo Parlamentario de Vox fue el único que rechazó participar en la reunión convocada por el portavoz de la Junta Directiva y el ministro de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, para discutir el anteproyecto de presupuesto de la Comunidad. El abogado de Unidas-Podemos, Pablo Fernández, fue citado el lunes cuando contactó telefónicamente con el portavoz.
Vox tampoco participó en la anterior ronda de reuniones convocadas por Fernández Carriedo para discutir y buscar apoyos al tope de gasto no financiero, que finalmente fue aprobado en el pleno del 6 de noviembre con el único voto favorable del PP y con su abstinencia. PSOE y los abogados del Grupo Mixto Francisco Igea y Pedro Pascual Muñoz, este último abogado de Por Ávila.
Pablo Fernández tampoco acudió a esa reunión con el portavoz del tope de gasto, para lo que puso «cuatro condiciones muy simples» para sentarse a discutir el tope de gasto y el «presupuesto falso», entre ellas revertir todas las reducciones de servicios públicos y todas las privatizaciones que el PP ha llevado a cabo en Castilla y León y destina «al menos» 3.000 millones de euros para la puesta en marcha de un fondo público de vivienda «razonable y asequible».
Por su parte, el Grupo Parlamentario de Vox puso como condición antes de establecer cualquier tipo de negociación con la Junta Directiva que el proyecto de ley de presupuestos fuera registrado, petición formulada por el resto de partidos que se negaron a participar en varias reuniones con el titular de la palabra. si las cuentas no son aprobadas en el Consejo de Gobierno.
Quienes fueron miembros del Gobierno del PP hasta el pasado mes de julio condicionaron su participación en las reuniones a la aceptación previa de las premisas que pusieron sobre la mesa para la creación de cuentas autonómicas, entre ellas un rechazo «claro y explícito» a las políticas de reparto de inmigrantes ilegales impulsados por el Ejecutivo central y que incluyen «planes de retorno efectivos» para estas personas, en la medida que lo permitan los poderes autonómicos.
A ello sumaron la recuperación de las medidas de Vox que quedaron suspendidas tras su salida en julio de los gobiernos de coalición, incluido el de Castilla y León.