Este jueves, las autoridades desmantelaron una red ilegal de tráfico de personas en El Salvador y arrestaron a más de 30 personas relacionadas con la estructura criminal, incluido un fiscal, según el Ministerio Público.
Además, las autoridades confiscaron hoteles y empresas de playa, así como dos empresas presuntamente vinculadas a la red de tráfico de personas, confirmó la oficina de prensa de la agencia.
La Fiscalía General informó que entre los arrestados se encuentra un subprocurador identificado como Roger Alfredo Flores Alvarenga, quien colaboraba con la estructura criminal.
Se emitieron 50 órdenes de arresto contra los miembros de esta estructura, y al menos 31 ya habían sido detenidos durante la jornada y serían acusados de tráfico ilegal de personas y asociaciones ilícitas.
Según las investigaciones, los «coyotes» -nombre dado a quienes se benefician del tráfico ilegal de personas- alojaban a los migrantes en el hotel Rancho Argueta, cerca del aeropuerto internacional de El Salvador, desde donde partían hacia las fronteras terrestres hacia Estados Unidos.
Los fiscales informaron que la red cobraba entre 14.000 y 16.000 dólares a las víctimas, y que los migrantes provenían de países como Brasil, Ecuador, Turquía, India, entre otros.
También se confirmó la incautación de dos hoteles de playa, dos empresas de inversión, una casa en Ciudad Versalles, departamento de La Libertad, así como un terreno rural en El Triunfo – departamento de Usulután, al oriente del país-, 84 vehículos, activos virtuales y cinco cuentas bancarias por un total de $2.284.641,54.
Según las autoridades, todos los detenidos serán llevados ante los tribunales para ser procesados por delitos relacionados con la trata ilegal de personas y grupos ilícitos.